Historias de San Luis: 48 kilómetros marcha atrás
Por Nino Romero
El título lleva a los amantes y conocedores de automovilismo a un formidable recuerdo.
Pero también a preguntarse ¿de qué se trata? Porque hay personas que no conocen del tema, o ni les contaron una proeza realizada por dos puntanos en el Rally Quinta Vuelta de San Luis que se corrió en setiembre de 1984.
Estoy refiriéndome a los hermanos Gilberto Iván (Tanti) y Oscar Scarpati, quienes participaron de esa competencia en un Fiat 128 IAVA con el número 66 y recorrieron 48 kilómetros marcha atrás por complicados caminos de las serranías puntanas desde la zona de El Trapiche hasta la ex Estación de Trenes ubicada en Avenida Lafinur e Illia, donde estaba ubicado el parque cerrado.
Sí, leyó bien. Casi 50 kilómetro marcha atrás en un rally.
Lo que pasó es que se rompió la caja de cambios, se cortó el embrague, y ante la imposibilidad de arreglarlo en el camino después de varios intentos, tomaron una decisión: terminarían la etapa a contramarcha, o sea marcha atrás.
Una decisión en caliente con muchas motivaciones personales y además riesgosa, teniendo en cuenta que se trataba de caminos sumamente complicados.
¿Qué hicieron? Tanti al volante y su hermano Oscar sentado en la puerta medio cuerpo afuera señalando la ruta y con una mano levantaba el capot del motor para ir echándole agua porque la temperatura que levantaba era infernal.
Las radios que transmitían la competencia ya habían informado a sus oyentes lo que estaba sucediendo, y le agregaron dramatismo a un momento épico.
Las transmisiones se seguían para saber si seguían en carrera y si habían pasado por tal o cual lugar.
Y fue un final feliz. Acompañados por una caravana y esperados por una multitud llegaron al Parque Cerrado en medio de una interminable ovación.
“Algo nunca visto en la historia de los rally”, comentaban los periodistas especializados, y fotógrafos y camarógrafos que seguían estas competencias por todo el país.
Voy a obviar muchos comentarios, porque es preferible compartir los testimonios de las publicaciones de esa época refiriéndose al tema.
Aunque alguien me dijo que el más apurado por llegar a la Estación de Trenes de cualquier forma era Tanti, porque lo estaban esperando, y si no lo hacía, incumpliría una promesa que le había realizado a su familia. Y Oscar presente. Firme como siempre.